Unidad en la diversidad y liderazgo al servicio de la misión
El pasado lunes 6 de octubre, con espíritu de fraternidad y esperanza, los Religiosos Camilos de la Provincia Española celebraron su Reunión de Superiores Locales en la comunidad de San Pere de Ribes, una jornada marcada por la comunión, la reflexión y el compromiso renovado con la misión camiliana.
Un dato especialmente significativo de este encuentro fue la presencia de superiores provenientes de siete nacionalidades distintas, reflejo vivo de la interculturalidad que enriquece la vida y el servicio de la Orden. Participaron el P. Agustín Bado (Burkina Faso), superior de la comunidad de Valencia; el P. Arnaldo Pangrazzi, consejero provincial de Italia y miembro de la comunidad de Tres Cantos; el Hno. José Carlos Bermejo, Superior Provincial de España; el P. Elysee, superior de la comunidad de Barcelona, originario de Benín; el P. Le Van Thuong, superior de la comunidad de San Pere de Ribes; el Hno. Long Tran, superior de la comunidad de Tres Cantos, naturales de Vietnam; y el P. Francisco Berola, superior de la comunidad de Vagues, en Argentina, quien participó virtualmente desde el hogar
Un espacio de oración, comunión y reflexión
La jornada comenzó con un momento de oración compartida con la comunidad local, guiado por las Constituciones de la Orden. Posteriormente, el Hno. José Carlos Bermejo abrió el encuentro agradeciendo la labor de los superiores y su disponibilidad para participar. En su intervención, abordó la realidad actual de la Provincia, las comunidades locales y los retos del envejecimiento, recordando cómo en su momento se pensó en San Pere de Ribes como casa de acogida para religiosos mayores o enfermos. Sin embargo, explicó que hoy esta atención se extiende también a otras comunidades, como las de Tres Cantos, Sevilla o La Baja, que ofrecen acompañamiento a los hermanos mayores.
El Superior Provincial también informó sobre la situación de los convenios interprovinciales y la presencia de religiosos de distintas partes del mundo que colaboran activamente en España. Además, anunció la próxima llegada de cuatro nuevos religiosos: el P. Anthony (Vietnam), el P. Denis (Burkina Faso), el P. Constantine (Benín) y el P. Brayan (Colombia). “Esta diversidad —señaló— es un signo hermoso de lo que somos como Orden: una fraternidad universal que encuentra en la interculturalidad una fuente de crecimiento y riqueza para nuestras comunidades”.
Vida fraterna y liderazgo humanizador
En otro momento de su exposición, el Hno. Bermejo insistió en la importancia de cuidar la vida fraterna, fomentando espacios de oración, encuentros comunitarios, retiros, hospitalidad y transparencia en la gestión de los bienes. Invitó también a los superiores a velar por el mantenimiento de las casas, jardines, vehículos, archivos y documentos, así como a revisar los contratos vigentes para asegurar su correcta regulación.
Cerró su intervención con una metáfora inspiradora de la “chiva colombiana”, comparándola con la Provincia: un vehículo colorido, diverso y cargado de vida, donde cada uno aporta su singularidad al camino común.
Mirada económica y reflexión sobre el liderazgo
El Hno. Long Tran presentó a continuación una panorámica de la situación económica de la Provincia, destacando los desafíos ante la próxima jubilación del administrador provincial, D. Emilio Villar. Se abordaron cuestiones relativas al estado de las casas, los inmuebles y la sostenibilidad futura. En este punto, el P. Francisco Berola compartió también la realidad de las propiedades en Buenos Aires y La Manuela, ofreciendo una visión internacional de la gestión camiliana.
Posteriormente, el P. Arnaldo Pangrazzi ofreció una profunda reflexión sobre “El liderazgo al servicio de la misión humanizadora de nuestras comunidades”. En ella, desarrolló cuatro grandes ejes:
-
Comunidad: como espacio de crecimiento, gozo y desafío, donde la diversidad es fuente de aprendizaje y apoyo mutuo.
-
Liderazgo: promoviendo un estilo democrático y participativo, basado en la humildad, la escucha, la flexibilidad y la creatividad.
-
Comunicación: como hilo vital que permite compartir emociones, esperanzas y objetivos comunes.
-
Gestión de conflictos: entendida como oportunidad de cambio y madurez, ofreciendo pautas prácticas para la resolución constructiva de las diferencias.
Un cierre fraterno y esperanzador
Por la tarde, el P. Agustín Bado presentó el Plan Estratégico de la Provincia, invitando a los superiores a aportar sus reflexiones y sugerencias antes de su difusión definitiva. Cada participante compartió también la realidad de su comunidad, los desafíos actuales y las esperanzas para el nuevo trienio.
La jornada concluyó con la celebración de la Eucaristía en la capilla del Hospital-Residencia San Camil, presidida por el P. Jhon, superior de San Pere de Ribes. Más tarde, todos los superiores y miembros de la comunidad participaron en un encuentro fraterno, en el que los religiosos mayores compartieron su testimonio y su gratitud, culminando con el rezo de las vísperas y la cena comunitaria.
Este encuentro ha sido un testimonio vivo de que la diversidad no divide, sino que enriquece; que el liderazgo en clave camiliana nace del servicio y la escucha, y que cada comunidad, con sus dones y limitaciones, sigue siendo un hogar de esperanza y fraternidad al servicio de los enfermos y de los más vulnerables.
Este espacio forma parte de la 
