Convocado el I Concurso de Diseño Gráfico “San Camilo”

El premio que establece el concurso es de 2.000 euros y los participantes pueden presentar sus creaciones hasta el 20 de marzo.

La Orden Ministros de los Enfermos, Religiosos Camilos, ha convocado el I Concurso de Diseño Gráfico “San Camilo” con el objetivo fomentar la creatividad publicitaria y difundir la misión y espiritualidad camiliana. El premio para el ganador del concurso es de 2.000 euros y el plazo para la presentación de las obras finaliza el 20 de marzo, según se establece en las bases del concurso. En este certamen podrán participar todas las personas mayores de 18 años, de cualquier nacionalidad y, de manera especial, se invita a participar a empresas de publicidad y diseño gráfico, así como a  alumnos de creatividad publicitaria de cualquier universidad. El fallo del jurado se hará público el 31 de marzo a través de los portales web www.camilos.es y www.humanizar.es. La obra creativa seleccionada se utilizará en la difusión de las actividades pastorales, en especial para la promoción de la pastoral juvenil y vocacional, de los Religiosos Camilos. Todos los que deseen participar deberán crear una obra en formato digital, que deberá contener una propuesta de imagen gráfica y aplicaciones adaptadas a cada diferentes eventos. El formato que se puede utilizar será jpg o tiff, pero en cualquier caso será una imagen nítida que se pueda reproducir correctamente. Las obras se pueden enviar por correo electrónico (info@sancamilo.org) o por correo postal a:

Religiosos Camilos.- Oficina de Comunicación
C/ Sector Escultores, 39
28760 TRES CANTOS (Madrid)

Los Religiosos Camilos celebran la Jornada Mundial del Enfermo.

Varias comundades religiosas de los "Camilos" en el mundo han enviado fotografías a la Oficina de Comunicación de la Curia Provincial de Roma con motivo de la celebración de la Jornada Mundial del Enfermo celebrada el pasado 11 de febrero. Esta celebración es especialmente importante para los Ministros de los Enfermos, Religiosos Camilos ya que el cuidado de los enfermos es el corazón del carisma de la orden fundada por San Camilo de Lellis. Reproducimos algunas de ellas que están editadas en la web www.camilliani.org.

Italia: Roma, comunidad de Santa María Magdalena.

A las 4 de la tarde, el P. General P. Renato Salvatore presidió la celebración eucarística en la Parroquia de San María en Aquiro, durante la cual se administró el sacramento de la unción de los enfermos a los fieles, concelebrada por el P. María Jesús Ruiz, Vicario General, El y el Padre Francisco De Macedo, Rector de la Iglesia de María Magdalena.

Italia: Roma, Casa di Cura "Villa S. Familia"

En el Hogar de Ancianos "Sagrada Familia” de Roma, también se celebró una eucaristía con la presencia de los residentes. En ella también se administró el sacramento de la unción y se comentó el mensaje del Papa Benedicto X.

Italia: Milán y Verona

En estas ciudades se organizaron unas charlas de formación para los trabajadores. En cada una de estas ciudades se presentó el mensaje del Papa a través de un médico y de un agente de pastoral. Las imágenes hacen referencia a la reunión en Milán con la presencia del Prof. Alfred Anzalone, vicepresidente de la Comunidad Europea de médicos católicos, y Don Carmine Arica, Presidente Nacional dell’Aipas.

Ecuador: Hospital Pablo Arturo Suárez de Quito

En el Hospital Pablo Arturo Suárez de Quito, la celebración tuvo lugar el 13 de febrero, en vez del 11 de febrero para poder contar con la presencia de un mayor número de enfermos. ue una celebración significativa por varias razones:

  1. Por primera vez se contó con la presencia y la cooperación del Director del Hospital y Jefe del "Personal de Enfermería". Ambos ayudaron en el suministro de carpas para la celebración ya que el espacio de la capilla era insuficiente para dar cabida a los numerosos fieles presente. Además, la dirección facilitó la organización a través del personal que estuvo acompañando a los pacientes durante la misa.
  2. En la celebración se pudo dar a conocer y compartir la misión y actividades de la capellanía en el Hospital.
  3. Todas las personas que colaboran con la capellanía, particularmente los voluntarios, prepararon la celebración con gran entusiasmo.

Canadá: Día de los enfermos en Quebec

Yo trabajo en una parroquia en la ciudad, Notre-Dame-de-Rocamadour, que incluye tres capillas. Después de cada misa, en sus respectivas capilla, invitamos a los enfermos a participar en la ceremonia del sacramento de la unción en las dos residencias de ancianos de la parroquia.

Pakistán: en el campo de desplazados de la ONU en Hyderabad (Lucas Perletti MI)

“Una sociedad que no consigue aceptar a los que sufren y que no es capaz de contribuir mediante la compasión a hacer que el sufrimiento sea compartido y llevada también interiormente es una sociedad cruel e inhumana” (Carta enc. Spe salvi, 38).

Estas palabras han resonado hoy con mucho sentido en el equipo médico y asistencial de uno de los campamentos para desplazados creado en los márgenes de Hyderabad tras las inundaciones que afectaron a Pakistán en los meses de julio y agosto de 2010. Hemos visitado a 215 personas que perdieron todo, que tuvieron que desplazarse y que además no encuentran alivio por el sufrimiento físico y la soledad. Hemos escuchado la ira de los padres, que se sienten engañados por las autoridades, hemos confraternizado con los que tratan de traer una sonrisa a los rostros de los niños, y hemos compartido el silencio y el dolor de las madres desarraigadas de sus tierras y sus hábitos. Este fue nuestro Día Mundial de los Enfermos, un verdadero signo de solidaridad con aquellos que viven en la pérdida de todas las referencias.

Tailandia Casa de los Enfermos Sagrada Familia

Como cada año, hemos querido celebrar el día del enfermo. Nuestra actividad está dirigida a personas de edad avanzada que tienen que vivir con la enfermedad y el sufrimiento.

El 11 de febrero hemos tratado de dar especial importancia a la celebración de la Eucaristía celebrada en la Sagrada Familia, Casa Sampran, invitando al P. Rocco Pairat, ex-provincial, para presidir la celebración como representante de la Conferencia Episcopal de Tailandia. Después de la homilía se ha administrado el sacramento de la unción de los enfermos de una veintena de personas que están enfermas o son ancianos. La celebración terminó con una foto de grupo. Ver galería de imágenes.

El 3 de marzo comienzan los Encuentros de Oración San Camilo. ¡Ven y lo vivirás!

El próximo jueves 3 de marzo a las 8 de la tarde darán comienzo los “Encuentros de Oración San Camilo” en la capilla del Centro Asistencial.

El próximo jueves 3 de marzo a las 8 de la tarde darán comienzo los “Encuentros de Oración San Camilo” en la capilla del Centro Asistencial. Estos encuentros son un espacio abierto a todas aquellas personas que deseen tener un rato de oración comunitaria en clave camiliana y siguiendo la metodología de la “lectio divina”. Los encuentros tendrán una periodicidad quincenal.

11 de febrero: Hoy se celebra la Jornada Mundial del Enfermo

Con este motivo, el Papa Benedicto XVI ha escrito un mensaje a los agentes de Pastoral de la Salud que reproducimos a continuación:

Mensaje del Papa para la Jornada Mundial del Enfermo 2011.

"Por sus llagas habéis sido curados" (1Pe 2,24)

¡Queridos hermanos y hermanas! Cada año, en la celebración de la memoria de la Beata Virgen de Lourdes, que se celebra el 11 de febrero, la Iglesia propone la Jornada Mundial del Enfermo. Esta circunstancia, como quiso el venerable Juan Pablo II, se convierte en una ocasión propicia para reflexionar sobre el misterio del sufrimiento y, sobre todo, para hacer a nuestras comunidades y a la sociedad civil más sensibles hacia los hermanos y las hermanas enfermos. Si cada hombre es hermano nuestro, tanto más el débil, el sufriente y el necesitado de cuidados deben estar en el centro de nuestra atención, para que ninguno de ellos se sienta olvidado o marginado: de hecho, “la medida de la humanidad se determina esencialmente en la relación con el sufrimiento y con el que sufre. Esto vale tanto para el individuo como para la sociedad. Una sociedad que no consigue aceptar a los que sufren y que no es capaz de contribuir mediante la compasión a hacer que el sufrimiento sea compartido y llevada también interiormente es una sociedad cruel e inhumana" (Carta enc. Spe salvi, 38). Las iniciativas que serán promovidas en cada diócesis con ocasión de esta Jornada, sean de estímulo para hacer cada vez más eficaz el cuidado hacia los que sufren, de cara también a la celebración de modo solemne, que tendrá lugar, en 2013, en el Santuario mariano de Altötting, en Alemania. 1. Llevo aún en el corazón el momento en que, en el transcurso de la visita pastoral a Turín, pude estar en reflexión y oración ante la Sagrada Síndone, ante ese rostro sufriente, que nos invita a meditar sobre Aquel que llevó sobre sí la pasión del hombre de todo tiempo y de todo lugar, y también nuestros sufrimientos, nuestras dificultades, nuestros pecados. ¡Cuántos fieles, en toda la historia, han pasado ante ese lienzo sepulcral, que envolvió el cuerpo de un hombre crucificado, que corresponde en todo a lo que los Evangelios nos transmiten sobre la pasión y muerte de Jesús! Contemplarlo es una invitación a reflexionar sobre lo que escribe san Pedro: “Por sus llagas habéis sido curados" (1Pe 2,24). El Hijo de Dios sufrió, murió, pero ha resucitado, y precisamente por esto esas llagas se convierten en el signo de nuestra redención, del perdón y de la reconciliación con el Padre; se convierten también, sin embargo, en un banco de prueba para la fe de los discípulos y para nuestra fe: cada vez que el Señor habla de su pasión y muerte, ellos no comprenden, rechazan, se oponen. Para ellos, como para nosotros, el sufrimiento permanece siempre lleno de misterio, difícil de aceptar y de llevar. Los dos discípulos de Emaús caminan tristes por los acontecimientos sucedidos aquellos días en Jerusalén, y sólo cuando el Resucitado recorre el camino con ellos, se abren a una visión nueva (cfr Lc 24,13-31). También al apóstol Tomás le cuesta creer en la vía de la pasión redentora: “Si no veo la marca de los clavos en sus manos, si no pongo el dedo en el lugar de los clavos y la mano en su costado, no lo creeré" (Jn 20,25). Pero frente a Cristo que muestra sus llagas, su respuesta se transforma en una conmovedora profesión de fe: “¡Señor mío y Dios mío!" (Jn 20,28). Lo que antes era un obstáculo insuperable, porque era signo del aparente fracaso de Jesús, se convierte, en el encuentro con el Resucitado, en la prueba de un amor victorioso: “Sólo un Dios que nos ama hasta tomar sobre sí nuestras heridas y nuestro dolor, sobre todo el inocente, es digno de fe" (Mensaje Urbi et Orbi, Pascua 2007). 2. Queridos enfermos y sufrientes, es precisamente a través de las llagas de Cristo como nosotros podemos ver, con ojos de esperanza, todos los males que afligen a la humanidad. Resucitando, el Señor no ha quitado el sufrimiento ni el mal del mundo, sino que los ha vencido de raíz. A la prepotencia del mal ha opuesto la omnipotencia de su Amor. Nos indicó, así, que el camino de la paz y de la alegría es el Amor: "Así como yo os he amado, amaos también vosotros los unos a los otros" (Jn 13,34). Cristo, vencedor de la muerte, está vivo en medio de nosotros. Y mientras con santo Tomás decimos también nosotros: “¡Señor mío y Dios mío!", sigamos a nuestro Maestro en la disponibilidad de dar la vida por nuestros hermanos (cfr 1 Jn 3,16), siendo así mensajeros de una alegría que no teme el dolor, la alegría de la Resurrección. San Bernardo afirma: "Dios no puede padecer, pero puede compadecer". Dios, la Verdad y el Amor en persona, quiso sufrir por nosotros y con nosotros; se hizo hombre para poder com-padecer con el hombre, de modo real, en carne y sangre. En cada sufrimiento humano, ha entrado Uno que comparte el sufrimiento y la soportación; el cada sufrimiento se difunde la con-solatio, la consolación del amor partícipe de Dios para hacer surgir la estrella de la esperanza (cfr Carta enc. Spe salvi, 39). A vosotros, queridos hermanos y hermanas repite este mensaje, para que seáis testigos de ello a través de vuestro sufrimiento, vuestra vida y vuestra fe. 3. Mirando a la cita de Madrid, en el próximo agosto de 2011, para la Jornada Mundial de la Juventud, quisiera dirigir también un pensamiento particular a los jóvenes, especialmente a aquellos que viven la experiencia de la enfermedad. A menudo la Pasión, la Cruz de Jesús dan miedo, porque parecen ser la negación de la vida. ¡En realidad, es exactamente al contrario! La Cruz es el “sí” de Dios al hombre, la expresión más alta y más intensa de su amor y la fuente de la que brota la vida eterna. Del corazón atravesado de Jesús ha brotado esta vida divina. Solo Él es capaz de liberar el mundo del mal y de hacer crecer su Reino de justicia, de paz y de amor al que todos aspiramos (cfr Mensaje para la Jornada Mundial de la Juventud 2011, 3). Queridos jóvenes, aprended a “ver” y a “encontrar” a Jesús en la Eucaristía, donde está presente de modo real por nosotros, hasta el punto de hacerse alimento para el camino, pero también sabedlo reconocer y servir en los pobres, en los enfermos, en los hermanos sufrientes y en dificultad, que necesitan vuestra ayuda (cfr ibid., 4). A todos vosotros jóvenes, enfermos y sanos, repito la invitación a crear puentes de amor y de solidaridad, para que nadie se sienta solo, sino cercano a Dios y parte de la gran familia de sus hijos (cfr Audiencia general, 15 de noviembre de 2006). 4. Contemplando las llagas de Jesús, nuestra mirada se dirige a su Corazón sacratísimo, donde se manifiesta en sumo grado el amor de Dios. El Sagrado Corazón es Cristo crucificado, con el costado abierto por la lanza del que brotan sangre y agua (cfr Jn 19,34), "símbolo de los sacramentos de la Iglesia, para que todos los hombres, atraídos al Corazón del Salvador, beban con alegría de la fuente perenne de la salvación" (Misal Romano, Prefacio de la Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús). Especialmente vosotros, queridos enfermos, sentid la cercanía de este Corazón lleno de amor y bebes con fe y alegría de esta fuente, rezando: “Agua del costado de Cristo, lávame. Pasión de Cristo, fortifícame. Oh buen Jesús, escuchame. En tus llagas, escóndeme" (Oración de san Ignacio de Loyola). 5. Al término de este Mensaje mío para la próxima Jornada Mundial del enfermo, deseo expresar mi afecto a todos y a cada uno, sintiéndome partícipe de los sufrimientos y de las esperanzas que vivís cotidianamente en unión con Cristo crucificado y resucitado, para que os de la paz y la curación del corazón. Junto a él vele a vuestro lado la Virgen María, a la que invocamos con confianza Salud de los enfermos y Consoladora de los afligidos. A los pies de la Cruz se realiza para ella la profecía de Simeón: su corazón de Madre está atravesado (cfr Lc 2,35). Desde el abismo de su dolor, participación en el del Hijo, María ha sido hecha capaz de acoger la nueva misión: ser la Madre de Cristo en sus miembros. En la hora de la Cruz, Jesús le presenta a cada uno de sus discípulos diciéndole: “He ahí a tu hijo” (cfr Jn 19,26-27). La compasión maternal hacia el Hijo se convierte en compasión maternal hacia cada uno de nosotros en nuestros sufrimientos cotidianos (cfr Homilía en Lourdes, 15 de septiembre de 2008). Queridos hermanos y hermanas, en esta Jornada Mundial del enfermo, invito también a las Autoridades para que inviertan cada vez más energías en estructuras sanitarias que sean de ayuda y de apoyo a los que sufren, sobre todo a los más pobres y necesitados, y dirigiendo mi pensamiento a todas las diócesis, envío un afectuoso saludo a los obispos, a los sacerdotes, a las personas consagradas, a los seminaristas, a los agentes sanitarios, a los voluntarios y a todos aquellos que se dedican con amor a curar y aliviar las llagas de cada hermano o hermana enfermos, en los hospitales o residencias, en las familias: que en el rostro de los enfermos sepáis ver siempre el Rostro de los rostros: el de Cristo. Aseguro a todos mi recuerdo en la oración, mientras que imparto a cada uno una especial Bendición Apostólica. En el Vaticano, 21 de noviembre de 2010, Fiesta de Cristo Rey del Universo.

BENEDICTUS PP XVI

El Área Sociosanitaria de CONFER organiza un curso sobre Voluntariado a religiosos mayores.

Los días 24 y 25 de febrero, el Área Sociosanitaria de CONFER organiza un curso sobre Voluntariado destinado a religiosos en la etapa de la jubilación.

El mes de febrero será intenso en la Conferencia Española de Religiosos. Para estos días está previsto que se lleven a cabo 4 cursos, organizados por las diferentes áreas. El primero de ellos se celebrará los días 17 y 18 de febrero en la casa de las Religiosas del Amor de Dios, en la C/ Asura. Organizado por la Asesoría Técnico-Jurídica, el tercer bloque de las Jornadas para Administradores lleva por título: Contratos civiles. Herencia y donaciones. Seguridad Social. Contratación laboral. Protección de Datos. Los temas serán presentados por el equipo de especialistas de la Comisión Jurídica de CONFER. El sábado 19 de febrero será el Encuentro de Delegados de Pastoral Juvenil Vocacional, que tendrá como tema central la Presencia de los religiosos/as en la Jornada Mundial de la Juventud. El encuentro también tendrá lugar en la casa de las Religiosas del Amor de Dios. El siguiente fin de semana, los días 24 y 25 de febrero, el Área Sociosanitaria de CONFER organiza el curso sobre Voluntariado religiosos en la etapa de la jubilación, en el mismo lugar que los anteriores. Contará con las exposiciones de José Luis Pinilla, sj, María Victoria Venero, ecj, y Gracia Polo Gaitán. El último fin de semana del mes, el Área de Justicia y Solidaridad organiza sus jornadas anuales, que en esta ocasión llevan por título: La Vida Religiosa, esperanza y profecía entre los hilos de la realidad. Será los días 25, 26 y 27 en la casa de las Religiosas del Amor de Dios, y contará con la participación del jesuita Víctor Codina, Charo Ramos, Ángel Mari Unzueta, Ana Isabel González, mmb, Manu Arrue, sj, Pepa Torres acj, entre otros. Se espera una alta participación en cada uno de los encuentros. Para más información e inscripciones, puedes visitar la página web de confer.

2 de febrero: Hoy celebramos la Jornada Mundial de la Vida Consagrada

El presidente de CONFER, Elías Royón, sj, ha aprovechado el lema elegido en esta ocasión, "Jóvenes consagrados, un reto para el mundo. Firmes en la fe" para "celebrar con gozo el don que el Señor ha hecho en nuestras vidas, y a través de ellas, a la Iglesia".

"Jóvenes consagrados, un reto para el mundo"

Como cada año desde que Juan Pablo II lo instituyera en 1997, hoy, día 2 de febrero se celebra la Jornada Mundial de la Vida Consagrada. Este año, y aprovechando la próxima visita del Papa en la Jornada Mundial de la Juventud, el lema elegido en España es "Jóvenes consagrados, reto para el mundo. Firmes en la fe". Con este motivo, el Arzobispo electo de Oviedo y Presidente de la Comisión Episcopal para la Vida Consagrada, Mons. Jesús Sanz, ha hecho público un mensaje en el que habla de "la juventud no es un factor cronológico sin más, sino una actitud ante la vida, con la mente y el corazón. Hay viejos prematuros o jóvenes perennes, y esto lo da no tanto la edad sino el modo de vivir las cosas. Firmes en la fe significa para un cristiano, y máxime para un consagrado, estar arraigados en esa tierra que acoge las raíces y las permite nutrir a fin de que el árbol plantado junto a la buena acequia pueda seguir dando frutos en sazón". Mons. Sanz ha continuado sus palabras asegurando que "el testimonio de los jóvenes consagrados acerca apasionadamente al Señor, hablando de una firmeza que arraiga en las auténticas raíces, y que narran desde un carisma suscitado por el Espíritu Santo en su Iglesia, lo que los demás jóvenes y el mundo entero necesitan ver: que los cristianos somos la prolongación en la historia la salvación de Dios". Por su parte, el presidente de la CONFER, el jesuita Elías Royón, ha usado, como hilo conductor de su mensaje, las palabras de San Pablo a la comunidad de Corinto para animar a seguir firmes en la fe, "Será siempre", dice el mensaje, "el desafío y el anhelo esencial de nuestras vidas consagradas: permanecer arraigados en la roca que no se desmorona ni cede ante los vientos y las tempestades; llamados a dar testimonio del primado absoluto de Dios, del sentido trascendente de la vida y de los valores que ello comporta, ofreciendo a nuestra sociedad un estilo de vida alternativo donde prive la centralidad de Dios". En España, según los datos que aportan los Superiores Mayores a la Guía de Comunidades de CONFER, hay 49.610 religiosos y religiosas en las 6.138 comunidades que existen en nuestro país. Según estos datos, existen 104 congregaciones masculinas y 302 femeninas. En cuanto a las masculinas, hay 155 novicios, 443 juniores y 10.874 religiosos de votos perpetuos, que hacen un total de 11.472. Por su parte, hay 38.138 religiosas, de las cuales 263 son novicias, 2.501 junioras y 35.374 de votos perpetuos. A estas cifras habría que añadir los más de  15.500 misioneros españoles, según fuentes de las Obras Misionales Pontificias. De los cuales cerca de 10.000 son religiosas y más de 5.500 religiosos. A continuación, reproducimos íntegramente el mensajedel Presidente de CONFER con motivo de la Jornada Mundial de la Vida Consagrada 2011 :

MENSAJE DEL PRESIDENTE DE CONFER, ELÍAS ROYÓN, SJ,

PARA LA XV JORNADA MUNDIAL DE LA VIDA CONSAGRADA

Queridas hermanas, queridos hermanos:

La próxima Jornada de la Vida Consagrada, en la festividad de la Presentación de Jesús en el templo, es una buena ocasión para celebrar con gozo y agradecer con humildad el don que el Señor ha hecho a nuestras vidas y, a través de ellas, a su Iglesia.

Todos recordáis que uno de los objetivos que señaló el Papa, al instituir esta Jornada en 1997, era precisamente invitar a las personas consagradas “a celebrar juntas y solemnemente las maravillas que el Señor ha realizado en ellas,…y hacer más viva la conciencia de su insustituible misión en la Iglesia y en el mundo”.

Celebrar con gozo y agradecer al Señor la responsabilidad de nuestra presencia misionera en la Iglesia; para quien la vida consagrada es “un don precioso y necesario también para el presente y el futuro porque pertenece íntimamente  a su vida, a su santidad y a su misión” (VC 3). No sólo tenemos, pues, una historia llena de servicios extraordinarios a la evangelización, sino una historia futura por construir, con la que estamos comprometidos, sabedores de nuestras pobrezas y debilidades, pero conscientes también de la fuerza del Espíritu que nos apremia y la confianza de la Iglesia que continúa envíándonos.

Os invito a releer con gratitud, las palabras que, en varias ocasiones, Benedicto XVI ha dedicado a la vida consagrada en los últimos meses. Así, aludiendo a nuestro quehacer evangelizador nos decía: “Deseo expresar mi vivo agradecimiento por lo que hacéis en la Iglesia y con la Iglesia a favor de la evangelización y del hombre”. Nos  definía como “buscadores de Dios”: ¡Sed siempre buscadores y testigos apasionados de Dios¡” y ha recordado la multitud de fronteras, en la Iglesia y en el mundo, donde le buscamos con fidelidad a nuestros propios carismas. Y concluía renovando su envío: “la misión forma parte de vuestra identidad; os impulsa a llevar el Evangelio a todos, sin fronteras…Id, por tanto, y con fidelidad creativa haced vuestro el desafío de la nueva evangelización. Renovad vuestra presencia en los areópagos de hoy para anunciar, como hizo San Pablo en Atenas, al Dios ‘ignoto’.” (A los Superiores Generales 26 novbre 2010).

Estas palabras entroncan bien con el lema escogido en España para celebrar esta Jornada: Firmes en la Fe. Jóvenes consagrados, un reto para el mundo, que se inspira en el encuentro de Benedicto XVI con los jóvenes de todo el mundo en la JMJ del próximo agosto.

“Firmes en la fe”: será siempre el desafío y el anhelo esencial de nuestras vidas consagradas: permanecer arraigados en la roca que no se desmorona ni cede ante los vientos y las tempestades; llamados a dar testimonio del primado absoluto de Dios, del sentido trascendente de la vida y de los valores que ello comporta, ofreciendo a nuestra sociedad un estilo de vida alternativo donde prive la centralidad de Dios.

Firmes en la fe para ser signos de gratuidad y amor en una sociedad que corre el peligro de verse asfixiada en la confusión entre lo efímero y lo útil, atestiguando la sobreabundancia de amor que impulsa a “perder” la propia vida para ganar la verdadera. (cfr Benedicto XVI, 2 febrero 2010)

La fe como adhesión personal a Jesucristo, amado apasionadamente, que no se confunde con la intransigencia ni el fundamentalismo, sino que provoca una relación personal con el Dios vivo, que nos elige para enviarnos al mundo; la vida consagrada expresa así la búsqueda de Dios y del hombre que es  esencial a su identidad.

Firmes en una fe en Jesucristo de la que brota un compromiso efectivo por la justicia, la paz, la creación, la reconciliación entre los pueblos, construyendo puentes en medio de las divisiones de una sociedad fragmentada.

Firmes en la fe en el Dios de Jesucristo, fundamento de nuestra esperanza. En esta esperanza nos gozamos, y desde ella nos encaminamos al futuro. Puesto que, como ha recordado el Papa, “la vida consagrada no podrá morir ni faltará a su Iglesia: ha sido querida por el mismo Jesús como parte inamovible de su Iglesia.” (5 noviembre 2010)

“Nacer de nuevo para una esperanza viva” afirmábamos en la Asamblea de CONFER del pasado Noviembre. “Nacer de nuevo”, es decir, dejarnos “revitalizar” por el Espíritu, una tarea de conversión siempre presente, que nos haga, en fidelidad creativa, descubrir nuevos modos de recorrer hoy los caminos del seguimiento de Jesucristo, y cómo llegar a ser escuela de comunión y esperanza para un mundo a quien Dios en su amor nunca abandona. “Porque la Iglesia tiene necesidad de una vida consagrada que afronte con valentía y creatividad los desafíos del tiempo presente” (Benedicto XVI, a los RR de Roma, diciembre 2005)

El lema de nuestra Jornada hace referencia explícita a los jóvenes consagrados. Una realidad que demuestra que la vida religiosa sigue teniendo un atractivo particular en nuestro tiempo, que puede llenar vidas exigentes y engendrar felicidad en su entorno. La donación gratuita y generosa de la propia persona fascinada por la llamada del Señor, la felicidad de su consagración, la vida en comunión fraterna, el entusiasmo por el anuncio de Jesucristo y el servicio a los más pobres, son los retos de estos jóvenes religiosos a la cultura de hoy. Como son los de los religiosos y religiosas de corazón joven para amar y apasionarse por el Evangelio, desgastados en la alegría y en el gozo de servir a Dios y al hombre, llenos de años de experiencia, pero disponibles para acoger la voz del Espíritu que nos hace “nacer de  nuevo”; así la vida religiosa recobra su juventud y renace para “una esperanza viva”. Esta es la exigencia de nuestro tiempo y el fruto del permanecer “firmes en la fe”, porque nos hemos dejado seducir por Jesucristo.

Quisiera para terminar,  dirigirme con gratitud, desde la comunión eclesial, a las comunidades cristianas con las palabras de Bendicto XVI: “si la vida consagrada es un bien para toda la Iglesia, algo que interesa a todos, también la pastoral que busca promover las vocaciones a la vida consagrada debe ser un compromiso sentido por todos: obispos, sacerdotes, consagrados y laicos”. (5 noviembre 2010)

Elías Royón, S.J.

Presidente de CONFER