Felicitación navideña

El equipo de dirección del Centro San Camilo de la provincia española de los religiosos Camilos felicita la Navidad a todo el equipo y a todas las personas que comparten la pasión por humanizar.

Queridos amigos:

¡Feliz Navidad!

Que hermosa posibilidad nos regalamos: Celebrar el Misterio de la Encarnación de Dios en Jesús. La empatía de Dios! ¡Qué gusto, celebrar la humanización, la expresión de la pasión por el bien de toda persona!

Desde San Camilo (Centro de Humanización de la Salud, Centro Asistencial y Fundación Asistencial San Camilo), nos unimos a todos aquellos que se apasionan por las múltiples formas de comprometerse con la humanización del mundo, especialmente en el contexto del sufrimiento.

Con mucho cariño, ¡Feliz Navidad! Un abrazo

Celebramos la Navidad en San Camilo

Los religiosos Camilos llevamos deseamos llevar el evangelio en el mundo de la enfermedad y la salud. La navidad es un tiempo de esperanza, familia y celebración de la alegría compartida. Una experiencia en ocasiones muy difícil de vivir cuando se está enfermo o al final de la vida.

Para hacer este tiempo lo más pleno y hondo a la persona que sufre en primer lugar nos colocamos en actitud de escucha y acogida; acogemos sus sufrimientos y miedos para ayudar a sostenerlos y avivar una esperanza auténtica y serena en el enfermo y su familia. Preparamos los lugares cuidando los detalles, como Camilo recomienda en sus consejos para el cuidado de los enfermos.

Esperamos que este tiempo de navidad nos permita acoger la vida que nace cada día en nuestras vidas y se encarna en todas aquellas personas que cuidamos o acompañamos en su duelo. Nos ponemos ante el reto de hacer presente la esperanza en sus vida, desde la presencia comprometida con la vida del que sufre.

Animamos a todos a tomar conciencia de esta actitud en el tiempo de Navidad y humanicemos este tiempo que puede haber perdido su sentido profundo. Vivamos la oportunidad de renovarnos por dentro y dejar que Jesús habite en nuestra vida acercándonos al hermano.

Los religiosos Camilos ante la adversidad

Hace más de 400 años, un día como hoy 23 de diciembre, víspera de la noche de Navidad, el rio Tiber se desbordó y puso en peligro a los enfermos del hospital del Santo Spirito de Roma y a gran parte de su población.

Este acontecimiento es recordado por los cronistas de la orden de los Ministros de los Enfermos ya que fue uno de los acontecimientos en los que el carisma fue un gran servicio para el pueblo de Roma. Los religiosos liderados por Camilo de Lelis pusieron su vida en riesgo para sacar a los enfermo y ponerlos en lugar seguro.

Un ejemplo que sigue siendo fuente de reflexión y toma de conciencia de las claves del cuidado de los enfermos. Más allá de las funciones cotidianas, o cuando el primer impulso nos llevaría a alejarnos del sufrimiento y la adversidad, Camilo de Lelis nos muestra como se acerca a la persona y carga con ella.

«En la Navidad de 1598, a causa de la extraordinaria inundación del Tíber,
después de una noche de grandes y fatigosos trabajos en Santo Spirito para
poner a salvo a los trescientos enfermos de la crujía Sistina, Camilo se
aventuró en barcas y balsas con otros de sus religiosos, en ayuda y auxilio de
los invadidos por las aguas. Muchos, asediados desde hacía tres días en sus
casas y tugurios, pedían ayuda y comida. Otros, atemorizados por la
continua elevación de las aguas del río, se habían refugiado en los techos
desde donde, ateridos de frío, pedían ayuda. Un testigo ocular, Francesco
Visdomini, asegura que la terrible desgracia le costó la vida a muchos
ciudadanos y procuró a Roma unos daños incalculables. El cardenal
Nepote, Pietro Aldobrandini, que se había asociado a la obra de socorro,
escapó milagrosamente de una muerte segura. Acababa de pasar por el
puente de Santa Maria, o Palatino, cuando la masa impetuosa de las aguas
arrastró y abatió los dos cabezales del puente, dejando apenas el arco del
centro, el que todavía emerge del cauce del río, además de la isla Tiberina»

Pregón de las fiestas de Navidad San Camilo

Compartimos la reflexión de José Carlos Bermejo, delegado general de los religiosos Camilos para la provincia Española con la que abría las festividades Navideñas en el centro San Camilo.

Os animamos a reflexionar con estas palabras y que nos permitan vivir con mayor profundidad la fiesta de la Navidad, Dios se Humaniza!

Arre borriquito, arre burro arre,
anda ligerito, aunque no llegamos tarde.
Que ha dicho el gerente y los concejales
que para felicitar en San Camilo, la rifa está que arde.

Ya queda poco para la Navidad, y estamos preparando la fiesta que para los creyentes es del Misterio de la Encarnación, del Nacimiento del profeta Jesús, gran humanizador que marca la historia y determina el año en que nos encontramos: 2021. Y para los no creyentes, es esa fiesta tradicional donde los encuentros familiares se ven reforzados en torno a la mesa y el intercambio de regalos y otras costumbres. Pero no todos saben el origen de los numerosos símbolos que en este tiempo nos acompañan.

Arre borriquito, arre burro arre,
que estamos por conocer el sentido del Belén,
del Arbol, de Papá Noel
y otros símbolos tan entrañables.

La historia del Nacimiento (el Belén)

Un “capricho místico” de San Francisco de Asís. Eso es el Nacimiento, el Belén, el Pesebre o, si es reducido a las figuras principales, el Misterio.

San Francisco estaba ya al final de su vida –moriría tres años después– cuando se retiró a pasar la Navidad en un eremitorio en el pueblo de Greccio, Italia, en 1223, y allí fue donde sintió la necesidad de reconstruir el nacimiento de Jesús.

Estaba prohibida la representación dramática en las iglesias, pero Francisco celebró con los habitantes del pueblo en lo que hoy llamaríamos un Belén viviente y se reprodujo el pesebre en una gruta que aún hoy se puede visitar y desde la que se divisa un precioso valle que fue el que, al contemplarlo, inspira la imagen de muchos de los Belenes.

Los franciscanos, reprodujeron la escena que habían visto en Greccio, pero con figuritas. Así se expandió el Belén, llegando a España con Carlos III en el siglo XVIII.

Arre borriquito, arre burro arre,
que vamos a decir en San Camilo
que sigan poniendo Belenes
para poder adorarle.

Los Reyes Magos

El 6 de enero se celebraba una fiesta desde tiempos inmemoriales en Oriente, pero con un sentido pagano: En Egipto y Arabia, durante la noche del 5 al 6 de enero se recordaba el nacimiento del dios Aion. Creían que él se manifestaba especialmente al renacer el sol, en el solsticio de invierno. La fiesta de la Epifanía sustituyó a estos cultos paganos de Oriente.

La historia de los Magos de Oriente evoca que después de haber nacido Jesús en Belén de Judea, en el tiempo del Rey Herodes, unos Sabios de Oriente se presentaron en Jerusalén diciendo: ¿Dónde está el que ha nacido, el Rey de los Judíos? Porque hemos visto su estrella en el Oriente y venimos a adorarlo…. Los Magos, con su diferente procedencia (de ahí que se presente a uno de color), quieren evocar que el nacimiento de Jesús llegará a ser relevante para todos los pueblos.

No falta quien cree que también la rosca de Reyes esté cargada de simbolismo tomado de costumbres judías de comer pan ázimo el 6 de enero, escondiendo un muñeco de barro dentro para evocar modos de esconderse, para evitar una recordada matanza que habría coincidido posiblemente cuando Jesús tenía 3 años.
Los primeros cristianos tomaron un poco de esta tradición y la mezclaron con la narración de la visita de los Sabios para la celebración de la Epifanía haciendo dulces en forma de Rosca, adornándolos con frutos del desierto, como higos, dátiles y algunas nueces.

Arre borriquito, arre burro arre
que solo en España tenemos Reyes Magos
que en Italia tienen a la Beffana (la bruja)
y en otros países ni pueden recordarle.
Arre borriquito, arre burro arre,
que Melchor, Gaspar y Baltasar,
en Tres Cantos salen de San Camilo
que, tras el chocolate, no hay quien les amarre.

Arre borriquito, arre burro arre,
escribamos todos la carta,
para que no traigan carbón
que queremos mejores salarios en esta profesión.

El árbol de Navidad

El árbol de Navidad tiene sus orígenes en la antigua creencia germana de que un árbol gigantesco sostenía el mundo y que en sus ramas estaban sostenidas las estrellas, la luna y el sol. Esto explica la costumbre de poner a los árboles luces.

El árbol era también símbolo de la vida, por no perder en invierno su verde follaje cuando casi toda la naturaleza parece muerta. En algunas casas, en los países nórdicos, durante el invierno, se cortaban ramas y se le decoraba con pan, fruta y adornos brillantes para alegrar la vida de los habitantes de la casa mientras transcurría el invierno.

Los primeros documentos que nos hablan de la costumbre de colocar en Navidad árboles de abeto o de pino en las casas son del s. XVI y menciona a la región de Alsacia.

Arre borriquito, arre burro arre,
cantemos en torno al árbol, a pesar de la pandemia,
villancicos religiosos o populares,
que para hacer fiesta no lleguemos tarde.

La historia de San Nicolás (Papá Noel o Santa Claus)

La leyenda de Papá Noel es antigua y compleja, y procede en parte de San Nicolás de Bari. ¿Quién fue Papá Noel? En ciertas regiones lo conocen como San Nicolás, en otras como Santa Claus, Papá Noel o el Viejito Pascuero.

San Nicolás de Bari fue un santo muy popular que se cree que falleció el 6 de diciembre del año 345. Sin embargo, como su día está cercano a la Navidad, se lo recuerda en esa fecha. Santa Claus evolucionó del nombre del santo en alemán: San Nikolaus. Parece que San Nicolás, perteneció a una familia muy rica, nació en Turquía y desde muy niño ayudó a los pobres, repartiendo sus riquezas. Fue nombrado obispo en Mira (Turquía). Por esto, en oriente se lo conoce como San Nicolás de Mira, aunque algunos católicos llevaron -en 1807- el santo a Bari (Italia) y lo denominaron San Nicolás de Bari.

En 1809 el escritor Washington Irving, escribió una sátira, Historia de Nueva York, en la que deformó al santo holandés, en la burda pronunciación angloparlante Santa Claus que regala juguetes a los niños en víspera de Navidad y que se transporta en un trineo tirado por nueve renos.
Posteriormente, un dibujante alemán diseñó este personaje para sus tiras navideñas. Allí adquirió su vestimenta y se cree que su creador se basó en las vestimentas de los obispos de viejas épocas.

Ya en el siglo XX, la Coca-Cola encargó un pintor que remodelara la figura de Santa Claus/Papá Noel para hacerlo más humano y creíble. Esta versión data de 1931.

Arre borriquito, arre burro arre,

vamos a visitar los Belenes
y a encender el de San Camilo
que al Niño Dios queremos honrarle.

Humanizando…

Amigos, hay que reconocer como adultos, que históricamente sabemos muy poco del nacimiento de Jesús, y que fueron dos evangelistas quienes, desde la experiencia de fe en el Resucitado, proyectaron sobre El, categorías importantes que refuerzan lo que importa, que es la bondad de Dios y del hombre, que hacen triunfar el Amor y acampar en nuestro mundo.
Seamos creyentes o no, la Navidad nos evoca nuestra infancia, nos invita a reforzar lazos familiares, provoca que nos hagamos regalos como expresión de nuestros vínculos significativos y quiere ser un momento de fraternidad universal –a la que se refiere el papa Francisco- que nos une en torno a la alegría, compatible con las lágrimas furtivas y los recuerdos del corazón.

Arre borriquito, arre burro arre,
sigamos poniendo Belenes
y escribiendo cartas a los Magos
que a niños y grandes vamos a alegrarles.
Y un belén nuevo ha nacido en San Camilo:
la hemodiálisis ha llegado.
nos cuesta y nos pone en vilo,
y en mejora de servicio nos deja bien parados.

Queridos compañeros de San Camilo:

Un mundo de cuidados, también en pandemia, es posible, como mostramos en San Camilo.
Un mundo de apoyo mutuo como compañeros, es posible, como mostramos en San Camilo.
Un mundo donde damos ejemplo en la humanización cuidando y enseñando, es posible, como logramos parcialmente en San Camilo.
Un mundo donde trabajamos por mejorar las condiciones laborales, donde trabajamos por las familias (en el Centro y en la Atención a Domicilio), donde buscamos la igualdad, la eliminación de sujeciones, la protección de datos, la excelencia en la gestión de la calidad, el buen trato, el buen morir, es posible, como intentamos en San Camilo.

Un mundo con “más corazón en las manos” –como decía San Camilo, es posible.
Un mundo más alegre, donde reine la ley del amor y de la paz, también en nuestra cotidianeidad, donde nos lo pongamos fácil unos a otros, es posible.
Celebrémoslo.

Arre borriquito, arre burro arre,
que ha dicho el Comité Asistencial
que a ese Niño
vayamos a adorarle.
Arre borriquito, arre burro arre,
vamos a visitar el Belén,
a cuidar a los mayores con ternura
y que en San Camilo la alegría y el amor, ganen.

Feliz Navidad a vosotros y a vuestras familias. Muchas gracias a todos.

José Carlos Bermejo

Celebrando la cercanía de la Navidad

En el Centro San Camilo hoy celebramos la cercanía de la Navidad y con la precaución y el respeto a la situación que estamos viviendo hemos compartido un momento de fraternidad.

P. Jesús Ruiz, superior de la comunidad de  religiosos Camilo de Tres Cantos, felicitaba la Navidad a todas las personas que comparten la vida en el Centro San Camilo; animándonos a seguir esta misión de cuidar a los más frágiles, el legado de Camilo. José Carlos Bermejo, delegado general de los religiosos Camilos y director general del Centro San  Camilo era también homenajeado hoy, por sus 25 años de trabajo en el centro y nos dedicaba una entrañable reflexión desde la que vivir con mayor hondura y conocimiento la Navidad; a través de los símbolos tradicionales que tenemos en este tiempo.

Es este encuentro también se brinda un cariñoso homenaje a las personas que se han jubilado trabajando en el Centro San Camilo y que continúan siendo embajadores de la cultura humanizadora que tanto tiempo han compartido. Agradecemos todos sus años de servicio y dedicación.

En un ambiente de alegría y festividad contenida hemos compartido este encuentro fraterno que nos anima a plantar una sonrisa, serena y esperanzada a la realidad que vivimos.

Que este espíritu de humanización nos habite esta Navidad, para que comencemos el nuevo año con un corazón renovado que nos lleve a continuar dando la vida por los enfermos.

CADIS comprometido con las víctimas del tifón Rai en Filipinas

El tifón Rai (Odette para los filipinos) ha dejado un rastro de caos y muertes tras su paso por el sur de Filipinas. Más de 200 personas han perdido la vida a causa de los vientos e inundaciones provocados por la feroz tormenta, y hay cerca de dos millones de damnificados, según el último balance ofrecido este lunes por las autoridades del país.

El tifón Rai es «uno de los más poderosos que jamás haya azotado el sur de Filipinas», lo ha descrito el presidente de Cruz Roja en Filipinas. La isla de Siargao soportó vientos máximos sostenidos de hasta 250 kilómetros por hora cuando la tormenta tocó tierra por primera vez el pasado jueves 16 de diciembre, con la fuerza equivalente a un huracán de categoría 5 en la escala de vientos de huracán Saffir-Simpson.

Más de 780.000 personas se vieron afectadas por el tifón. El tifón tocó tierra en nueve provincias del 16 al 17 de diciembre. La población total de estas provincias supera los ocho millones de personas. 400.000 personas necesitan ayuda urgente y apoyo a largo plazo, incluida asistencia para la vivienda y los medios de subsistencia.

Se están realizando evaluaciones iniciales por parte de las autoridades locales y los organismos humanitarios pertinentes. El alcance de los daños a vidas y propiedades aún no está determinado debido a la dificultad de llegar a las comunidades afectadas y la falta de energía y señales de Internet. La mayoría de los sobrevivientes están aislados, sin hogar y desamparados.

Las necesidades prioritarias incluyen paquetes de alimentos, comidas listas para comer, agua potable, medicamentos, personal médico, equipo de protección personal, ropa (incluido calzado y ropa para la lluvia), equipo y utensilios de cocina, kits familiares, refugio y material para dormir, kits de higiene, kits para desastres y bolsas impermeables.

En el cuarto domingo de Adviento, el Papa Francisco durante el Ángelus hizo un llamamiento al mundo para estar con los supervivientes que esperan celebrar la Navidad con sus seres queridos con esta palabra: “Expreso mi cercanía al pueblo filipino afectado por un fuerte tifón, que ha destruido muchas viviendas. Que el Santo Niño traiga consuelo y esperanza a las familias más necesitadas; ¡y que nos inspire ayuda práctica a todos! La primera ayuda genuina es la oración «.

En respuesta al “grito de los pobres”, Camillian Disaster Service International (CADIS) de los religiosos camilos está llevando a cabo una operación de ayuda en colaboración con la Sociedad de Ex-Seminaristas Camilianos de Bohol.

A medida que nos acercamos a la celebración de la Navidad, hagamos sentir nuestros más sinceros deseos de paz y justicia en el mundo a los sobrevivientes de este súper tifón Rai.

Como colaborar:

  1. A través de la web de camilos.es pinchando aquí
  2. A través de la cuenta del Banco de Santander ES73 0049 5068 1923 1619 1063 Titular: Ministros de los Enfermos (Religiosos camilos) con la finalidad «Ayuda a Filipinas»

Contamos con vuestras oraciones y con vuestra ayuda.

Felicitación Navideña del Centro San Camilo

José Carlos Bermejo, delegado general de los religiosos Camilos para la provincia española y director del Centro San Camilo dedica unas parlabas de entrañable motivación navideña a todos los amigos de centro.

El nacimiento de Jesús de Nazaret es una de las fechas más importantes para todos los cristianos, una expresión evocadora de la humanización de Dios. Con el deseo de vivir esta gran fiesta religiosa de manera más honda y profunda, compartimos este mensaje en forma de felicitación; que nos ayude a transformar nuestro corazón y a seguir trabajando por la humanización y el cuidado de las personas:

«Queridos amigos, Feliz Navidad, feliz celebración del nacimiento del Niño Jesús.

El hecho histórico de Jesús de Nazaret, en la historia de la Humanidad, representa un referente de humanización sin igual.

La propuesta de este hombre, de cuidado compasivo, entrañable, a todos los enfermos, vistos de manera integral, ha sido en la historia un referente de humanización, todavía susceptible de ser explorado y profundizado.

Las dinámicas de fe, por otro lado, en Jesús de Nazaret, después de haber sido asesinado y resucitado, han constituido, para millones de personas, un dinamismo, una dinámica, una motivación impresionante, que han generado mucha humanización en el mundo de la salud y del sufrimiento humanos

Por eso os invito a que celebremos con gozo, los creyentes y los no creyentes, este Nacimiento, de nuevo, de Jesús; esta vez, dándole espacio, una vez más, en nuestros corazones. Para que también ahora se convierta en un potencial renovado de humanización en el mundo de la salud.

¡Feliz Navidad!

feliz celebración de la empatía, de la humanización de Dios con nosotros.

Un abrazo con mucho cariño».

Compartimos el carisma camiliano con los jóvenes

En el final de trimestre hemos compartido un encuentro con los alumnos de las diferentes formaciones de FP del Centro San Camilo para hablar de la figura de Camilo de Lelis y su carisma. 

Bajo el carisma de enseñar a cuidar nos acercamos a los alumnos de las formaciones profesionales que capacitan a los alumnos para el cuidado de personas en centros sanitarios y sociosanitarios, como para la asistencia en el domicilio. Compartimos con los alumnos la pasión por humanizar el cuidado de las personas.

La vida de Camilo de Lelis es fuente de inspiración para cualquier persona que descubra el valor del cuidado a los demás y se deje guiar por esta misión. Su fe, su trabajo y su carisma le llevaron a transformar el modelo de atención a las personas en los hospitales de la época, pero también la mirada sobre las personas enfermas y la manera de cuidar al que sufre.

Esperamos que todo aquel que pasa por cualquiera de las obras de los Religiosos Camilos dedicadas a la formación no se vaya indiferente, que sea capaz de llevarse una gran capacidad técnica, pero también una mirada humanizadora. Esta mirada es la clave de la puesta en acción de ver a cualquier persona como un hermano, al que cuidar y servir.

Siempre es un placer poder compartir estos espacios de reflexión y conocimiento, en la que descubrir la vida de Camilo de Lelis y dejarnos interpelar por su vida.